La zona de lectura está conformada por una superficie cómoda. Esto puede ser un sillón tamaño niño/a, un colchón pequeño o simplemente algunos almohadones. Junto a este espacio, va situada la biblioteca.

Nuestra biblioteca Montessori se divide en dos: una va contra la pared y a la altura del adulto. Esta va a ser la biblioteca principal que contiene todos los libros.

La otra se apoya sobre el piso y a la altura del niño/a. Es una biblioteca más pequeña que contiene los libros que se van a utilizar ese día o semana.

La cama Montessori se caracteriza por estar al ras del suelo. De esta manera el niño/la niña puede acceder y descender con total independencia.
¿A partir de qué edad pueden dormir en una cama Montessori? No me cansaré de repetirles que cada niño/ niña es diferente. Si se animan, pueden empezar a utilizar las camas a temprana edad y solo para las siestas. Y para sentirse del todo cómodos pueden reforzar la seguridad rodeando el colchón con almohadones. En caso de que el bebé se gire y caiga, los almohadones pueden amortizar la caída.

A medida que el niño/la niña vaya creciendo, pueden ir adaptando la cama a sus necesidades pero sin dejar de respetar la primera regla: que puedan acceder y descender de la cama por si solos.

Lo más importante es que cumplan la consigna principal: que estén a la altura del niño/la niña así

puede acceder a las actividades por sí solo/a.
Una de las funciones de los estantes es generar un orden visual donde el niño/la niña puede observar las actividades y elegir con libertad con cuál trabajar.
Al mismo tiempo generan un nivel de organización donde se pueden ordenar las actividades de más simple a más complejas o separarlas por categorías.

Para que un ropero sea Montessori es importante que cumpla dos funciones:

La primera es que esté a la altura del niño/la niña y la segunda, que el niño/la niña tenga fácil acceso a la ropa que necesita para el día a día.

Como en general los roperos Montessori son bastante pequeños, la idea no es utilizarlos para guardar toda la ropa sino para dejar a su disposición la ropa que necesita para el día a día: ropa interior, pijamas, zapatos, medias, etc.

La torre Montessori es un mueble que le facilita al niño/la niña el acceso a los muebles de cocina. Al subirse a la torre, quedan a la misma altura que el adulto, y de esta forma pueden participar de las tareas del hogar como cocinar o lavar los platos. Pero lo que diferencia a la torre de otros muebles, es que su diseño hace que el niño/la niña esté seguro/a, sin peligro de caerse.

La torre Montessori plegable tiene doble función: puede utilizarse como torre de aprendizaje y también puede plegarse hasta transformarse en una mesa con un asiento incluido.

Es un mueble que le facilita al niño/la niña el acceso a los muebles de cocina. Al subirse a la torre, quedan a la misma altura que el adulto, y de esta forma pueden participar de las tareas del hogar como cocinar o lavar los platos.